Uno de los principales problemas que nos encontramos en la computación normal es que añadir más núcleos o hilos a nuestro equipo no se traduce en un escalado lineal en el rendimiento, hasta el punto de que algunas tareas pueden llegar a no mostrar ninguna mejora en el rendimiento, o en el peor de los casos, una bajada del mismo dependiendo de la arquitectura del procesador o del sistema.
Sin embargo, tal como leemos en TechPowerUp, parece ser que una compañía llamada Morumi está desarrollando un procesador que se llevaría esta máxima por delante para ofrecer una escalabilidad infinita en paralelo, lo cual significa que, en este caso, a más núcleos, más rendimiento.
Esto sería también de forma lineal, razón por la que la escalabilidad sería infinita, pues no existiría un límite máximo teórico en el cual el rendimiento no se duplicase al añadir el doble de núcleos gracias a una nueva arquitectura que reparte los datos a los núcleos del procesador antes de ser procesados a través de una red mesh dentro del propio procesador.
Evidentemente, esto requiere de software especialmente compilado para este chip, pero esto es típico a nivel de optimización de software para cada nuevo hardware que aparece en el mercado.